Obando y Vegas Altas.
Enclavada en un asentamiento llano, al otro extremo que Talarrubias, acogiéndose al abrigo de la Sierra de Pela, constituye la puerta de la Siberia por el itinerario procedente de Villanueva de la Serena.
Como otras del entorno, en los tiempos pasados la población perteneció jurisdiccionalmente a la ciudad de Trujillo, y en lo religioso, a la Diócesis de Plasencia, en cuyo seno continúa. En el ámbito comarcal, la localidad es conocida familiarmente como Pela, y sus naturales como "peleños".