En Peñalsordo nos encontramos, por un lado, sabores nacidos de la propia naturaleza -productos de caza, de pesca o de huerta-, y por otro, el recurso natural de sabores traídos por nuestros antepasados fenicios, griegos, romanos, visigodos, árabes y castellanos. El aceite de oliva, imprescindible en nuestra cocina, está presente en casi todos los platos, a los que aporta un toque de autenticidad. El cordero forma parte de nuestras raíces gastronómicas, las chuletas y calderetas hacen las delicias de los paladares más exigentes. El cerdo es la base para las tajadillas -carne adobada de cerdo frito- y lechón adobado. |
Ajoblanco |
La herencia de nuestras gachas que tradicionalmente se consumen en las Fiestas de todos los Santos y que constituyen un plato a base de harina, azúcar, agua, sal, canela, aguardiente y trozos de pan frito. También se deben a la misma herencia las natillas consumidas en Semana Santa, al igual que las rosquillas, buñuelos, mantecados y por supuesto las exquisitas flores.
Otro de los platos típicos de Peñalsordo es el conocidísimo cocido o puchero, especialmente de garbanzos, a base de tocino, huesos añejos de jamón, morcilla lustre -de sangre-, chorizo, tortitas, carne de gallina, etc.
Las migas y potajes junto con los buenos productos silvestres como los espárragos trigueros, cardillos -revueltos-, achicorias y las riquísimas criadillas de tierra constituyen una nueva variedad.
Concretando aún más destacaremos platos de la primavera y verano. Se trata de comidas más bien ligeras y refrescantes, sin demasiados ingredientes, nos referimos, sobre todo, a los gazpachos, ensaladas y por supuesto al popular ajo blanco.
Especial mención merece los maravillosos rellenos que solían servirse durante las comidas de las ceremonias nupciales tradicionales y que se elaboran a base de huevos cocidos y batidos como aglutinantes, jamón en trocitos, perejil, azafrán y ajos machados. Todos estos ingredientes, convenientemente introducidos en la tripa y cocidos ofrecen al paladar un delicioso sabor.
Son platos típicos de la gastronomía de Peñalsordo:
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Flores |