Aunque la pertenencia del núcleo a la Orden del Temple fue breve, como testimonio de tal época perduran a las afueras del caserío los restos del viejo castillo erigido por esta institución en el siglo XIII, y cuya fábrica fue demolida en el XIV por haberse convertido en refugio de salteadores y bandoleros. Estas ruinas son las conocidas a nivel local como "La Cava"

Entre las realizaciones que denotan el abolengo de Siruela destaca la iglesia parroquial de Ntra. Sra. De la Antigua, construcción de gran cuerpo, que preside la plaza en la que también se levantan los restantes edificios más señalados del lugar. La obra, erigida posiblemente sobre una fortificación precedente, presenta estructura de ladrillo y piedra con gran movilidad de formas, conservando al interior la cubierta de madera original.

Inmediata a la iglesia, delimitando otro de los costados de la plaza, se encuentra el convento de monjas clarisas, erigido en el siglo XVI y reformado en el XVII por la Condesa Leonor.

Del hospital de San Francisco, fundado en 1591 por Francisco de Vargas "El Perulero", se conserva su imponente fachada de piedra y la elegante portada.

Elemento peculiar situado también en el mismo ámbito es la llamada "Torre del Reloj", a la que se adosan otras construcciones de interés.