La iglesia parroquial de Ntra. Sra. de la Esperanza se trata de una realización en la que aparecen elementos que no se repiten en otros lugares. La obra, de grandes proporciones y compleja organización arquitectónica, es originaria del siglo XV y repetidamente remodelada después, presentando distintas zonas bien diferenciadas.
Entre ellas se distinguen la torre fachada delantera, con atrio en el cuerpo inferior y remate almenado de factura mudéjar; galería alta, cabecera cupulada de gran desarrollo con capillas anejas, etc. Escudos gárgolas y otros componentes completan su interesante configuración. |
Remate de la torre de la Iglesia> |
Muy característica de la localidad resulta la casa fuerte palaciega que se localiza en el extremo oriental de la villa, asentándose sobre una base rocosa. Su construcción fue iniciada en 1.477 por el Comendador santiaguista Rodrigo de Cárdenas, no concluyéndose hasta un siglo más tarde, siendo aquí donde radicaba la Encomienda de la Orden.
Constituye una sólida realización de mampostería y piedra, de planta hexagonal irregular, con macizos muros almenados a los que se adosan siete cubos cilíndricos de refuerzo. Sobre la esquina meridional se abren sendas terrazas sobre arcos, originando una estructura volumétrica de gran plasticismo. Una placa y un escudo imperial sobre la portada principal, aluden a la finalización de la obra en tiempos de Felipe II.
El convento de la Concepción, fundado en 1.542 por Íñigo de Rosales, se sitúa en las proximidades de la iglesia parroquial.
De las cuatro ermitas con que contó la localidad, sólo se conservan la ermita de Ntra. Sra. del Valle, de fuerte sabor popular, y la ermita de la Piedra, habiendo desaparecido las de San José y San Juan. Aneja a la primera, se sitúa una pintoresca placilla de toros de forma irregular, asentada sobre una acusada pendiente, en la que se aprecia la atención dedicada a su cuidado. En sus inmediaciones se erige también un pozo de nieve.
Elementos de notable significación etnográfica de los que se conserva un valioso repertorio, son las fuentes y pilares tradicionales con sus abrevaderos. Como piezas más destacadas cabe recordar los del Carmen, Cuatro Caños, Paniagua y "Pedro Capitán". En las traseras del castillo se sitúa el llamado "de Abajo", obra de granito que por su configuración y plasticismo resulta modelo especialmente representativo. |
Vista de Valencia del Ventoso |
En el pueblo se desarrolla en la actualidad una inusual actividad, consistente en la fabricación artesanal de instrumentos musicales de cuerda, por parte de un experto lutier local.