El monumento más distintivo de la localidad es su castillo, en el que residieron los Señores de Feria hasta su traslado al Alcázar de Zafra a mediados del siglo XV. Fue edificado en piedra sobre un asentamiento llano, en 1.418, por Don Gómez Suárez de Figueroa, aprovechando una fortificación anterior de origen árabe. Se sitúa en un extremo del poblado, al que domina con su enorme presencia.
Consta de recinto exterior o barbacana de planta cuadrangular y otro central de mayor altura con cubos adosados, organizado en torno a un angosto patio de armas, destacándose en el conjunto un potente torreón cuadrangular al que se adosan otros semicilíndricos. Según ciertas opiniones, el patio central pudo haber estado cubierto primitivamente, cobijando una mezquita árabe sobre la que posteriormente se consolidaría la fortificación. Aunque en la actualidad muy maltrecho, el castillo ofrece una sugestiva silueta sobre el horizonte. |
Realización destacada también es la iglesia parroquial de la Purificación, obra gótica originaria del siglo XVI, muy modificada después, que preside la amplia plaza del pueblo. Presenta planta de nave única y cabecera ochavada, con vistosas cubiertas de crucería y capillas anexas entre estribos. A los pies se alza una torre fachada, contemporánea de la nave en la parte baja, sobre la que se erigieron los cuerpos de campanas en el siglo XVIII. Las portadas son de sencillo diseño. En el interior se conservan varios retablos barrocos de mérito entre los que sobresale el de la capilla mayor, obra de gran cuerpo con ostentosa decoración.
Entre las imágenes cabe citar la de la titular del templo, el Cristo crucificado y, sobre todo, la de Ntra. Sra. de Montevirgen, excelente talla gótica del XIII.
La ermita de esta advocación se sitúa a las afueras del pueblo. Se trata de una atractiva creación popular, compuesta por nave única con cabecera cupulada, camarín, atrio y demás anejos propios de las ermitas camperas. Ocupa un hermoso paraje natural, y a ella acuden en romería cada año el 8 de Septiembre numerosos participantes de todo el partido judicial.
En el pasado existió en la localidad un convento de franciscanos, también bajo la advocación de Montevirgen, hoy desaparecido.