Como edificio más representativo se levantó, presidiendo la plaza, la iglesia parroquial, dedicada naturalmente a Santa Amalia. Se trata de construcción de mampostería encalada, de sabor neoclásico, que al interés de resultar una de las escasas realizaciones de este estilo en la región, une el de ser la última levantada en este territorio según los cánones de la arquitectura clásica tradicional, si se exceptúa la más tardía, aunque también de digna resolución, de Peraleda del Zaucejo, erigida en 1.945. Una segunda iglesia de traza modernista descontextualizada del medio ambiental, dedicada a San Antonio, se levantó en un extremo del pueblo en época actual, pretendiéndose, tras su inauguración en 1.982, derribar el noble templo anterior, despropósito que con buen criterio fue finalmente impedido. |
Iglesia parroquial de Santa Amalia |